Balcón florido

 

  Ahí está la roca, la que pesa en los hombros, la que encorva la espalda. En la oscuridad y en silencio, gestos imperceptibles, la piedra ignora su oquedad. Una micro danza se inicia, algo se gesta, verde y liberador.

  Soy silencio, soy la que frena al viento furioso, la que convierte el aire en lluvia,   en ríos torrentosos y esconde la luz de la luna para que al verla asomar  te conmuevas.   Soy quien te dice hasta acá, soy tu espalda, testigo de la vida, del movimiento, de seres que se desarrollan ante mi. Los vuelvo a la tierra,   para que broten   nuevos, en un ciclo interminable.  

  Ya no más,   y respiro, temblaba la llave en la puerta y en mi diario,   escribía, hoy mal, ayer también, mañana peor. Ahora , me siento recién nacida.   Ya no más, me arrancó hijos   y piernas, por tu culpa, me decía, por mi culpa, por mi grandísima culpa, por las dudas, me humillaba   primero.   Ya no más, no volveré a comer de tu plato de piedras, y por no convertirme en Lot no vuelvo la vista, esta vez, me abrazo a los girones de mí.

  EL VIENTO VA SUSURRANDO Y YO LO VOY A ESCUCHAR   PARA MI CANTA CANCIONES DE VIDA Y DE LIBERTAD.   EL MAR SUSURRA POESÍA EN CARACOLES QUE VAN   NAVEGANDO ENTRE PALABRAS Y OLAS QUE QUIEREN BRILLAR.

  Se desovilla en mis manos, una lanita verde, la tejo entre   las plantas, para que el color se vea más fuerte,   mirando un poco la trama y otro poquito el cielo, entre hileras algún mate, para enhebrar pensamientos.   “Tejo la vida, la vida entera, a veces poncho y otras bandera”,   me invento coplitas para que flamee entre latidos, y recuerdo mientras tejo, a las mujeres de mi casa,   en ese ritual de abrigo, cada punto como un mantra que proteja y que bendiga a sus nombres bordados,   para que no haya olvido.

  Navidad ¿De qué está hecha la Navidad? Nos hace brindar con las miradas, abrazarnos en la distancia, encender las sonrisas de boca en boca. ¿De qué estará hecha la Navidad? Ensueña nuestro corazón lleno de trinos, tordos músicos nos sobrevuelan con su canto y hebras amorosas con las que arman su nido en nuestro árbol. ¿De qué estará hecha la Navidad? Convierte a la noche en luz y le da otra consistencia al aire, lo llena de reflejos como si fuera rìo. Nos acaricia el pelo, nos limpia las rodillas, nos acomoda el vestido y nos tira papelitos de colores. ¿De qué estará hecha la Navidad? Cuando junto agua con el cuenco de mis manos sabe a ternura. Quisiera descubrir su ADN, encontrar su esencia, acertar su sabor justo de nueces y manzanas, multiplicar su alegría, su liviandad, y con esa pócima dar de beber a este mundo maltrecho.

  Te voy a contar un secreto   cuando ando por la calle con la luz del día miro el cielo y las hormigas   las copas de los árboles   la hoja caída lo bien que combina un pantalón con su blusa, dos gorriones que conversan, la cuenta del almacén,   como en una ensalada o un guiso se van mezclando   los ingredientes bien cortados,   con reproches, en qué estaba pensando cuando respondí tal cosa   o cuando me quedé callada o cuando hice lo que hice   o cuando no hice nada.   y en esas estoy   cuando cae la tarde , en lo oscuro se encienden luces detrás de los vidrios de las ventanas   figuras borrosas entre colores iluminados se me aprieta el alma ,ese es mi secreto,   se calla lo que me habla dentro de esa casa o esa otra alguien se alivia de haber llegado tal vez con un sueño tal vez una charla el rencuentro con alguien querido, un querer liviano   de una ventana a otra mi angustia es la misma La fragilidad de todo, el tie

    EL FONDO DE MI ESCUELA PARECE UNA SELVA Y TIENE UN MONTÓN DE PLANTAS. ES HERMOSO MIRAR PARA ARRIBA CUANDO ESTOY DEBAJO DE ALGÚN ÁRBOL Y VER QUE LAS RAMITAS CON EL FONDO DEL CIELO  PARECEN DIBUJOS DE TINTA CHINA. VENÍ DAFNA ¿JUNTAMOS PLUMAS? ME DIJO EMILIO MOSTRÁNDOME DOS PLUMITAS ANARANJADAS. YO PENSABA HACERLE UN COLLAR PRECIOSO A MI MAMÁ Y EMILIO NO SÉ QUÉ QUERÍA HACER, PERO LAS METÍA EN UN SOBRE CON MUCHO CUIDADO. EMILIO ELIGIÓ UNA DE LAS MÁS LINDAS Y SUAVES QUE HABÍA ENCONTRADO PARA LLEVÁRSELA A SU TÍO VETERINARIO, — ¿HACE PELUCAS PARA PÁJAROS PELADOS?  — LE PREGUNTÉ. — ¡PÁJAROS CON PELUCAS! ESTÁS LOCA DAFNA  — ME DIJO Y SE EMPEZÓ A REÍR. MIENTRAS CORRÍAMOS LOS DOS PERDIENDO PLUMAS POR EL CAMINO, SALIÓ NUESTRO AMIGO DARÍO, A LOS GRITOS DESDE EL FONDO DE UN CANTERO, SOSTENIENDO POR LAS PATAS A UN PÁJARO MUERTO. ¡MIREN LO QUE ENCONTRÉ! GRITABA Y MOSTRABA AL PÁJARO QUE TENÍA SUS ALAS ABIERTAS. EMILIO Y YO NOS MIRAMOS Y ENSEGUIDA TIRAMOS LAS PLUMAS QUE HABÍAMOS GU